El Maestro impartía su doctrina en forma de parábolas y de cuentos que sus discípulos escuchaban con verdadero deleite, aunque a veces también con frustración, porque sentían necesidad de algo más profundo. Esto le traía sin cuidado al Maestro, que a todas las objeciones respondía: Todavía tenéis que comprender, queridos, que la distancia más corta entre el hombre y la verdad es un cuento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario